La unidad como camino

La magia acontece en la unidad, la celebración del reencuentro, la amistad como secreto del éxito, cuando el amor se transmite la energía se expande para que el arte que habla a través de su manifestación se encuentre con las almas que buscan recibirlo.

La quinta luna del festival de Cosquín fue un abrazo al alma de todos aquellos que estuvieron presentes mientras se escribía la historia. La historia de aquellos que actúan y escriben su carrera profesional, la historia de aquellos que escuchan y crean anécdotas y vivencias que recordarán, la historia de aquellos amores que se hicieron letras de canciones y aquellas luchas sociales que se hacen eternas, álmicas, expansivas y unidad.

La unión de las almas que vibran en la misma frecuencia que aquello que aman, despierta un poder expansivo que conmueve a todos lo que lo puedan sentir.

José Luis Aguirre y una canción a su barrio que tan parecido como diferente, es el barrio de todos en el inconsciente colectivo. Los Cuatro de Córdoba que festejando sus 55 años, hicieron que todos formen parte de un éxito que se cosecha en la carrera y sobre todo en los amigos, invitaron a decenas de artistas a abrazarse en el escenario y celebrar. Porque el logro en la vida de todos, no es simplemente el tiempo que pasa y los resultados que obtenemos, sino saber sembrar el amor suficiente para que en la cima del éxito no lo cosechemos solos.

Celebrar la vida por haber cantado, vivido, bailado, crecido y construido juntos, cada uno en su camino y todos en la unidad. Así te das cuenta que la humildad extiende lazos de crecimiento mancomunado, que la unión despierta ese poder que alimenta e incentiva. Porque el éxito personal es una construcción individual que te encuentra en el abrazo con el otro, que celebra lo que amas.

La Juntada con Raly Barrionuevo, Peteco Carabajal y el Dúo Coplanacu haciendo profundo hincapié en que sus pasiones los hicieron amigos y la amistad los hizo familia. Tomas consciencia que no importa si el escenario es artístico o de la vida, todos somos protagonistas de una obra única e irrepetible. Si la vivimos con gratitud y esperanza, la celebramos en compañía, la construimos con humildad, el resultado será el éxito que habremos querido y expandiremos el poder de la creación originando la vida, construyéndonos a nosotros mismos.